NO LLORES CARIÑO. Estrategia para la educación emocionalmente inteligente

No llores cariño, ¿Cuántas veces le hemos dicho esto a nuestros hijos u otros seres queridos?  Las emociones se contagian y cuando alguien se siente triste, empatizamos con su pena y nuestro principal deseo es que vuelva a sentirse bien. Para ello, rápidamente ponemos en marcha toda una batería de estrategias, como negar la importancia de lo ocurrido (no es para tanto, no te preocupes que no pasa nada), solventar el problema (tranquilo/a, compraremos otro) o recurrir a la distracción (¿quién tiene cosquillaaas?).

La pena, como las demás emociones, forma parte de nuestra existencia, de nuestras vivencias y tenemos derecho a sentirla. Para ayudar a otra persona a afrontar esta emoción, a superarla sin negarla, debemos  escuchar con empatía, sin prisa, con aceptación. Que otra persona reconozca y acepte nuestros sentimientos disminuye en gran medida nuestro dolor y nos motiva a seguir hacia adelante.

Esta es una estrategia tan sencilla que podemos pensar que consiste en no hacer nada, pero paraos a recordar por un momento quién os ha ayudado de verdad en un momento difícil y veréis que siempre ha sido alguien que os ha escuchado y ha aceptado vuestras emociones.

Ilustro este pequeño texto con una imagen de la película Del Revés. Esta escena es un ejemplo precioso de escucha y aceptación. Si no habéis visto la película os la recomiendo, si ya la habéis visto os propongo que volváis a ver esta escena e imaginéis que sois vosotros, padres y madres, en un momento de educación emocional con vuestra hija o hijo.

 

Share Now

mpm

More Posts By mpm

Related Post

Leave us a reply