el espejo de alicia
Las emociones gobiernan nuestro día a día y parecen inevitables. Ciertamente a veces lo son, pero en muchas ocasiones tenemos capacidad para decidir sobre ellas, para cambiarlas por otras, para reducir o ampliar su intensidad.
Conocer cómo interactúan la razón, la respuesta corporal, la emoción y la acción, nos hace más capaces de regularnos.
en la biblioteca:
en familia o con la clase
Dado que estas propuestas utilizan la narración como un elemento central, tienen cabida en las bibliotecas y otros espacios culturales.
Pueden plantearse:
En familia: aporta a las familias ideas y herramientas para educar la inteligencia emocional. Transmite un tono, un enfoque, que sirve de guía. Proporciona una vivencia compartida y enriquecedora, da lugar a otras conversaciones y momentos.
Con el cole: acerca la biblioteca a todos los escolares, proporciona un entorno novedoso y estimulante.
para infantil, primaria,
eso y bachillerato
En el aula, acompañados de su profesor/a.
50 o 60 minutos por grupo.
Es necesario disponer de un espacio libre de mobiliario en el que trabajar en asamblea.
El número de sesiones y los contenidos se ajustan a la demanda del centro.
"El espejo de Alicia" incluye una gran variedad de propuestas con contenidos y dinámicas que se adaptan a las diferentes etapas educativas.
Nombrar y reconocer las emociones.
Fomentar el autoconocimiento y aceptación.
Reconocer y gestionar la frustración.
Aprender cómo se produce el enfado y el poder que tenemos sobre él.
Atrevernos a conocer al miedo.
Comprender que todas las personas tenemos el "poder" de hacer de este mundo un lugar mejor.
Reforzar la autoestima.
Aprender a valorarnos con independencia de la opinión de los demás...
Todas las propuestas vienen acompañadas de dinámicas diseñadas para vivenciar, experimentar, plasmar.... lo que queremos aprender.
para mamás y papás
a través de la ampa, la biblioteca...
Foro de aprendizaje para mamás y papás.
Hablaremos de educación y respeto, de disciplina positiva y de Inteligencia Emocional. Revisaremos esquemas y crearemos otros nuevos.
Lo haremos experimentando.
Lo haremos con cariño y con sentido común.
La gestión de emociones como el enfado, los celos, la timidez, la frustración... y el establecimiento de normas y límites, son tareas para las que madres y padres no cuentan más que con su sentido común.
Establecer un límite significa mantener un equilibrio entre el respeto que damos y deseamos para nuestros hijos y el respeto que pedimos y esperamos de nuestros hijos. Encontrar ese espacio de equilibrio es una de las tareas más difíciles.
La gestión de las emociones está presente en cada momento de nuestra vida. La buena educación emocional es fundamental para lograr una adecuada autoestima y satisfacción personal, para acercarnos al bienestar y la felicidad. Una tarea de esta relevancia debe estar sustentada sobre el conocimiento, la planificación y la reflexión.
Para las familias supone siempre un gran apoyo y fuente de satisfacción poder contar con un espacio donde formarse, dialogar y compartir sus dudas e inquietudes.
Educar niñas y niños emocionalmente sanos e inteligentes es empezar a construir una sociedad más justa, flexible y tolerante.
Esta formación suele impartirse en cuatro sesiones de 90 o 120 minutos, aunque puede adaptarse a las necesidades de la organización.
Recibe siempre la mejor de las valoraciones por parte de las familias que asisten.
Lo que manifiestan valorar más, es la cercanía de contenidos y ejemplos con los que se identifican, lo amenas que resultan las sesiones, cuánto ayuda a normalizar y desculpabilizar ver que los problemas de tu familia son los mismos que los de las demás familias, tener una brújula orientativa para guiar tus decisiones.